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domingo, 24 de septiembre de 2017

Vas enamorando artistas.

Tú, que no sé si eres piedra fría o mineral magnético. Tú, que no sé si eres tierra inerte o elemento, simplemente agua o la corriente. Nos llevas. Vas enamorando artistas para no morir nunca tú, para que te dibujen, te canten o te escriban, como yo. Quieres ser lienzo, música y tinta. Buscas la inmortalidad que tu cobardía en vida no ha dejado plasmar.

Judit Castilla. (2017)

domingo, 16 de abril de 2017

La isla.

Cuando estás la gravedad pesa más. Cuando estás, esta isla, mi isla, la tuya, pierde su sujeción; la mía, la tuya... y el flotar nunca se nos dio demasiado bien. Cuando estás, sin saberlo, lo sé, porque esta isla me lo hace saber. Te das a conocer en el aire, en el mar, en las noches, en mis sueños al alba. Y sus anclajes ya no encadenan, te buscan para que no te vuelvas a ir aún cuando no sea cierto que estés aquí. Tu isla necesita de tu voz, de tu ingratitud, y yo la sigo. Y te sigo. Y estás, aunque no estés, en cada rincón, en cada playa, en cada canción en el coche mientras paso sin querer, pero quiere ella, por tu puerta. Y si te encuentra, si me acerca a tus ojos arrastrándome sus olas, se desprende ella del mar, y ya no es una isla, sino que se crea infinita. Se olvida de distancias, aviones y pasado. Y la isla, mi isla, la tuya, echa el ancla en ti.

Judit Castilla (2017, y todavía).

domingo, 27 de noviembre de 2016

A todos mis escritores, aunque sólo aparezcáis algunos:

Vivo en los versos que escribo y luego deshecho. ¿Entonces vivo? ¿Me deshago?
Existo entre las palabras que dibujo con timidez de ser creadas, pero aun así me creo como se creaba Juan Ramón, 
como se hacía el árbol por naturaleza de Huidobro. Pero, ¿y si Darío acertó? si ese árbol
es apenas sensitivo y entonces no siento... 
A veces me nazco en el dolor, última forma de amar, porque me estoy sintiendo 
vivir cuando me duele, como Salinas; y a veces en la alegre música que Lorca defendía para
expresar eso que nadie conoce ni lo puede definir pero que en todos existe.
Entonces, desordenado corazón dadaísta, ¿cómo puedo poner orden en mi caos 
de infinitas e informes variaciones?, 
¿cómo puede, Alberti, darme la poesía a cambio de mis penas tanto como dejé para tenerla?
Porque si esa poesía me da la libertad de crearme y descrearme,
pintarme y despintarme,
nacerme y matarme en instantes,
yo, a su merced, ¿qué soy?

Judit Castilla (2016)

jueves, 6 de octubre de 2016

Que me he ido.

"Cuando creas que me he ido y no recuerdes ya ni mi tono de voz, sentirás por un segundo mi perfume entre las mujeres de tu ciudad. Cuando creas que me he ido te verás, de repente, buscándome en cada una de las ondas de su pelo. Otro pelo. Cuando creas que me he ido, entonces, será verdad. Que esos ojos que andas buscando para que te busquen una vez más ya no están. Que me he ido."

Judit Castilla

jueves, 15 de septiembre de 2016

Y te alejas..

Y te alejas de mí... Sin rodeos, sin introducciones.
Y me quedo en silencio.
Espero. Te veo despacio, te miro distante.
Y sin darte la vuelta te llevas el alma,
me dejas en calma. No lo sabes....

Te vas y no te das cuenta que me voy yo de ti.
Y me huyo, esfumándome. Fria. Ya serena.
Y me marcho callada, sin nombre, sin nada.
Sin trueno que avise, sin fuego en la noche.
Y luego preguntas y ya no respondo.

Ya no hay latido, ni piel, ni olor ni sonido.
Me aparto mientras te escribo.
Ya no existo de la manera que existí en ti,
para ti, para nosotros.
Ahora soy mía, sólo, a lo mejor no.

Como un imán invertido,
como en un juego perdido...
Me alejas si te alejas.

Judit Castilla (2016)

jueves, 29 de mayo de 2014

Fear drops.

Esa debilidad humanamente estúpida que me quema en el silencio de la noche, sólo me crea la ilusión de necesitarte. Y más tarde, mucho más tarde, después de escuchar pasar las horas en desvelo, vuelve la luz y con ella mi fuerza inconsciente; ese ansia de libertad que no consigo encaminar. Y ya únicamente me importa volar, estar por encima de las nubes y los pájaros y sentarme a cantar con ellos, esperando con miedo a que vuelva esa madrugada en la que no sé dónde esconderme para evitar echarte de menos. Entonces me doy cuenta de que esa fortaleza era mentira.

Judit Castilla.

viernes, 28 de febrero de 2014

Pedro Salinas.

"No quiero que te vayas 
dolor, última forma 
de amar. Me estoy sintiendo 
vivir cuando me dueles 
no en ti, ni aquí, más lejos: 
en la tierra, en el año 
de donde vienes tú, 
en el amor con ella 
y todo lo que fue. 
En esa realidad 
hundida que se niega 
a sí misma y se empeña 
en que nunca ha existido, 
que sólo fue un pretexto 
mío para vivir. 
Si tú no me quedaras, 
dolor, irrefutable, 
yo me lo creería; 
pero me quedas tú. 
Tu verdad me asegura 
que nada fue mentira. 
Y mientras yo te sienta, 
tú me serás, dolor, 
la prueba de otra vida 
en que no me dolías."