Te gustaría que pusiera la palabra amor y que paseara con la felicidad de la mano, te gustaría verme emocionada día a día y que pintara corazones sin tener que tacharlos.
Quisieras verme con ganas de reir, con los ojos iluminados de esperanza por las noches cuando te escribo, y no húmedos.
Estás harto de líneas depresivas, de frases sin vida, de tachones con un nombre, de números que ya no existen, de palabras que reflejan algo que no quieres ver más. Y siento no poder decirte que no las escribiré más, siento quedarme inherte sin sonrisas, siento que nadie lo pueda entender y siento el no dejar de sentir.
JCM*
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